El terreno de juego mide 21,4 por 21,4 metros. Participan doce jugadores, sin distinción de sexo, divididos en tres equipos de cuatro. Los partidos duran 45 minutos, repartidos en tres tiempos de un cuarto de hora. Se juega con un gigantesco balón negro, rosa o gris cuyo diámetro alcanza los 122 centímetros. En cada saque, todos los jugadores del equipo atacante deben estar en contacto con el balón. Al sacar, se grita la palabra clave (Omnikin) más el color color del conjunto al que va dirigido el ataque. El equipo nombrado debe intentar controlar el megabalón antes de que toque suelo (no importa con qué parte del cuerpo). Si lo consigue, se convertirá en equipo atacante y realizará el próximo saque. En cada pérdida de balón, consiguen un punto los equipos atacante y el que no participaba en la jugada.
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